Desde Bodegas de Argentina hablaron de las consecuencias negativas asociadas a las retenciones por la exportación del vino
“El 8% de derechos de exportación al vino agravará al extremo la mala situación de las
exportaciones y tendrá repercusiones negativas en el año 2024”, explican.
Bodegas de Argentina, la cámara empresarial que agrupa a más de 250 bodegas y empresas proveedoras del sector vitivinícola, manifiestó la profunda inquietud de sus asociados ante el Proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, que “de manera desalentadora propone la imposición del 8% de derechos a las exportaciones de vinos amenazando directamente el sustento de cientos de miles de trabajadores”
En el análisis a fondo de la medida se entiende que el 8% en la facturación de exportaciones de vinos equivale a:
Sumar sólo 60 millones de dólares a las arcas estatales, constituyendo apenas el 0.005% del
gasto público.
Perjudicar aún más la competitividad de las exportaciones argentinas frente a países sin
gravámenes a las exportaciones.
Acentuar la caída de las ya mermadas ventas al exterior del vino, que en último año
decreció aproximadamente el 30%.
Entregar al estado un mes completo de ingresos por exportaciones.
Un tercio del monto que las Bodegas gastan en concepto laboral.
Un cuarto de las compras de materias primas e insumos
Superar los fondos destinados a promoción y publicidad, normalmente alrededor del 5% de la facturación.
Reducir la cantidad de empleos directos e indirectos, impactando negativamente en la
inclusión y arraigo en las zonas vitivinícolas.
Generar consecuencias negativas en actividades relacionadas como el enoturismo, fuente vital de ingresos en divisas para la región.
Resultar en la pérdida de valor agregado de un producto que podría degradarse fácilmente a la categoría de commodity.
La explicación en números
La devaluación del tipo de cambio oficial y el mix para la liquidación de exportaciones del 80% tipo de cambio oficial y 20% dólar financiero, inicialmente generan una mejora competitiva del 20%, que disminuye al 12% con la aplicación del 8% en concepto de derechos de exportación.
De manera similar, el tipo de cambio para las importaciones aumenta un 118% debido a la devaluación anunciada y al incremento del impuesto país.
Como resultado de los puntos mencionados, los proveedores de los insumos más críticos han anunciado incrementos del orden del 60%. Los nuevos tipos de cambio, la
aplicación del 8% en derechos de exportación, sumados a una devaluación proyectada del 2% mensual y una expectativa de inflación del 25% para el primer trimestre, colocan a las exportaciones de vinos en una situación crítica que repercutirá a lo largo de toda la cadena de valor.
“Frente a esta realidad, desde Bodegas de Argentina instamos a las autoridades nacionales a reconsiderar esta medida. Convocamos a los gobernadores con desarrollos vitivinícolas a ilustrar sobre esta situación, y solicitamos a los legisladores nacionales que no respalden las retenciones a las exportaciones de vinos en las instancias correspondiente”, exponen desde la cámara empresarial